El concejal Marcos Nicolini hizo algo imperdonable dentro del mundo cerrado y autoritario del intendente Miguel Lunghi. Le plantó una interna e intentó disputarle la candidatura a intendente, nada más y nada menos en su última chance de reelegirse, cuando iba ya por el 5to mandato y un sector grande del radicalismo quería oxigenar la gestión.
Pero Nicolini perdió la interna y por más que haya apoyado a Lunghi en las elecciones generales, para el pediatra fue algo imperdonable y ya se dieron los primeros pasos de su inflexibilidad con quienes considera «traidores».
La semana pasada, al conocerse la conformación del equipo que lo acompañará en su último mandato, quedó confirmado lo que se suponía: los hombres y mujeres que responden a Nicolini quedaron afuera de los puestos del poder comunal, lo que valió una critica del joven abogado den los medios de comunicación.
Ahora, se conoció que no contento con eso, el inflexible mandatario comunal echó a dos funcionarias que responden al líder del Ateneo del Tercer Siglo: Se trata de Natalia Correa, subsecretaria de Cultura y Educación por dos mandatos, y de Florencia Benavente, integrante de la Secretaría de Protección Ciudadana.
Así las cosas, todo parece indicar que no habrá vistos de renovación en el Ejecutivo local y que, como quedó demostrado, cualquiera que se salga de los lineamientos propuestos por «Miguel», será castigado con dureza.
