Corría el año 2017 y faltaban dos días para las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias que en Tandil llevaban a Mario Civalleri como candidato a primer concejal de la lista de Miguel Lunghi, el intendente que se había puesto la campaña al hombro.
Era un viernes 11 de agosto lluvioso y sonó el teléfono de la directora del Conservatorio de Música Isaías Orbe de Tandil, Annele Moroder. Del otro lado hablaba el intendente Miguel Lunghi y la llamaba para avisarle que había hablado con el viceministro de Obras Públias de Vidal, que según el intendente era «un hombre serio», y le había asegurado que «a fin de mes» saldría la licitación para realizar el edificio del conservatorio.
Casi un año después, y sin noticias del anuncio que el intendente realizó en plena campaña electoral (y en plena veda), en agosto de 2018, se desencadenó una serie de sucesos que dejó al desnudo la fragilidad edilicia, no solo del conservatorio, sino también del IPAT.
El 30 de agosto de 2018 cayó el cielorraso de un aula del Conservatorio y motivó la reorganización de la comunidad educativa en su lucha por un edificio propio y digno, problemática que fue sumando las voces de otras instituciones terciarias de la ciudad. En ese momento las autoridades provinciales definieron la clausura de la antigua sede del Conservatorio, y en ese entonces, el IPAT (Instituto del Profesorado de Arte de Tandil) también se quedó sin sede porque se decidió la clausura donde impartían clases junto a la escuela Polivalente.
Desde entonces la lucha de los estudiantes, profesores y autoridades por conseguir edificios dignos para seguir estudiando, enseñando y trabajando, logró reunir a una masa crítica importante, por un problema que afecta a unos 1300 alumnos.
Finalmente se logró que parte de los alumnos comiencen a cursar en las instalaciones de la estación de Trenes, pero como las condiciones no son la adecuadas por las goteras y otros problemas edilicios, se reanuda nuevamente la lucha por un edificio digno.
El próximo paso a seguir será la realización de un festival el 1° de septiembre, en 9 de Julio y San Martín, a un año de que se cayera el techo del Conservatorio. Será a partir de las 15 y toda la comunidad está invitada a participar y apoyar el reclamo.
