Cuando en el cierre de fin de año de su fuerza política, el principal referente de la oposición a Miguel Ángel Lunghi, el concejal Rogelio Iparraguirre, aludió a unos «100 tipos» que pululan en los cargos políticos de la ciudad y van rotando entre ellos de la mano del intendente, no se equivocaba.
La feroz pelea por quién encabezará el quinto mandato consecutivo a partir del año que viene se desató en los medios de comunicación al tiempo que hay tandilenses que no llegan a cubrir sus necesidades básicas por la crisis económica desatada por sus socios del Gobierno Nacional.
De hecho Claudio Érsinger es un hombre del PRO y fuertemente aliado a Marcos Nicolini, y es quien ahora decidió darle volumen a la pelea y atacar la gestión del intendente Lunghi, de la que fueron fieles servidores tanto Nicolini como él.
El concejal mandato cumplido le dijo al Diario El Eco que “una ciudad como Tandil, que tiene una gran dinámica entre lo público y privado requiere desde mi punto de vista un nuevo impulso para sumar iniciativas y creo que la ciudad se merece tener opciones y distintos nombres que han mostrado capacidad de conducción”, cmenzó Ersinger.
“Hay pequeñas señales que indican que esta gestión, que el año entrante cumplirá 16 años, se va como durmiendo mientras que la ciudad sigue acelerando su ritmo de manera exponencial”, añadió.
Si bien no es un ataque frontal, pega en la línea de flotación de un gobierno que en su último mandato hizo agua. al tiempo que sus socios del gobierno nacional y el provincial tuvieron escasos momentos de felicidad para transmitir buenas noticias.
