La polémica había surgido en la sesión del Concejo Deliberante del 9 de agosto Cuando el concejal de Unidad Ciudadana Rogelio Iparraguirre sacó a la luz pública el crítico estado de los ascensores camilleros del Hospital Ramón Santamarina, a raíz de un proyecto que había presentado el Ejecutivo pidiendo utilizar el Fondo de Ayuda Solidaria para proceder a su reemplazo. El proyecto había sido retirado sin explicaciones, pero Unidad Ciudadana conservaba fotocopias.
Los informes que acompañaban el proyecto y en el que se basó Iparraguirre para averiguar lo que estaba sucediendo, daban cuenta del estado crítico de los ascensores, incluso corriendo riesgos de desprendimiento del piso de uno de ellos “con las imaginables y funestas consecuencias que esto ocasionaría”, según expresaba el texto que llevaba la firma de la responsable de infraestructura del Hospital, Marta de Rico.
Finalmente, Iparraguirre manifestó sus sospechas de que el estado crítico de los ascensores era algo que ya se sabía en 2017, ya que los informes y pedidos de presupuesto a las empresas estaban fechados en enero y febrero de este año, por lo que dejaba inferir que no habían querido incluir el reemplazo en el Presupuesto 2018 y hacerlo por fuera, como terminó sucediendo, utilizando el FAS.
Por su cuenta, y en una jugada insólita, el presidente del Sistema Integrado de Salud, el contador Gastón Morando, brindó una conferencia de prensa junto a Marta de Rico y desmintieron el informe que ellos mismos habían presentado. También explicaron que el proyecto había sido retirado del Concejo Deliberante porque a raíz de la disparada del dólar, el oferente había retirado la oferta, ya que los costos habían cambiado.
Se aprobó en el HCD
Finalmente durante la sesión de este jueves, el proyecto para la utilización del Fondo de Ayuda Solidaria fue acompañado por todos los bloques, no sin atravesar un largo debate en el que se plantearon todas las cuestiones que habían sucedido en torno a los ascensores.
Iparraguirre presentó sus críticas y fue contundente al señalar sus objeciones pero explicó que «entendemos la urgencia”, por lo que accedió al tratamiento sobre tablas del proyecto y su aprobación, pero repasó los hechos que se sucedieron con los informes técnicos que alertaban sobre el deterioro y apuntó a la postura expuesta por los funcionarios inmediatamente después de que tomara estado público.
Iparraguirre le reclamo al presidente del Concejo, Juan Pablo Frolik, que tome las medidas necesarias para “hacer valer este cuerpo porque si no parece que se nos ríe a todos», en referencia a que aún no tuvo respuesta respecto del pedido de informes elevado el 15 de agosto.
Por su parte Nilda Fernández, del bloque Integrar, suscribió a lo expuesto por su colega de Unidad Ciudadana y apuntó contra el oficialismo: “viven mintiéndonos”.
