Finalmente ayer se aprobó en el Senado la ley que pone fin a las reelecciones indefinidas, y que fuera presentado como el primer paso de la reforma política. La iniciativa, presentada por el Frente Renovador en 2013, tuvo fuerte impulso desde la llegada al poder de María Eugenia Vidal.
La Ley limita a una única vez la reelección de intendentes, concejales, legisladores y consejeros escolares y, al mismo tiempo, determina, con “excepciones”, la incompatibilidad de cargos entre el Estado bonaerense, el nacional y los municipios.
De este modo, Miguel Angel Lunghi, con cuatro períodos en el ejercicio del poder, finalmente deberá dejar su puesto por una normativa votada por su propio espacio político.
Aun no se cumplió un año de su nuevo mandato y diferentes versiones periodísticas daban cuentas de que Lunghi desea (o aspira al menos) volver a presentarse en 2019, para tener un quinto período al frente de Ejecutivo. Es esperable, que ante la nueva normativa, apoyada y votada por la alianza Cambiemos, el intendente, casi desde una dimensión ética y moral, de paso a nuevas generaciones. ¿Cómo volver a presentarse si hay una ley que impide elecciones indefinidas?
Vale aclarar que la normativa asegura que el actual mandato de los funcionarios alcanzados será contabilizado como el primero, por lo que solo podrán aspirar a una reelección en 2019, en el caso de los ejecutivos, mientras que en el caso de los legislativos en 2017 o 2019, según corresponda.
