Seis veces más caro: el aumento silencioso de los servicios públicos

La política de «sinceramiento tarifario» implementada por el Gobierno nacional desde diciembre de 2023 produjo una profunda reconfiguración en el esquema de subsidios y derivó en incrementos generalizados en los servicios públicos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

Según un relevamiento del Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP, UBA-CONICET), entre diciembre de 2023 y octubre de 2025 la canasta de servicios públicos, que incluye electricidad, gas natural, agua y transporte, se incrementó 514%, lo que equivale a una suba de seis veces en menos de dos años.

Esto significa que un hogar de clase media que en noviembre de 2023 pagaba alrededor de $50.000 mensuales por esos servicios, actualmente destina cerca de $300.000.

Caída de los subsidios

En paralelo, los subsidios energéticos y al transporte sumaron en lo que va del año $6 billones, una reducción del 46% respecto de 2024.

El nuevo esquema de financiamiento estableció que los usuarios del AMBA comenzaron a cubrir una parte mayor del costo real de los servicios, mientras que los sectores más postergados —en especial quienes viven en villas o asentamientos— siguen recibiendo subsidios directos.

En esos casos, el consumo eléctrico se mide a través de medidores centrales que agrupan a los hogares de cada barrio y cuyo pago es cubierto por los gobiernos provincial o porteño. Este sistema abarca a Edesur y Edenor en electricidad, y a Metrogas y Naturgy en gas natural.

Cuánto subió cada servicio

El relevamiento del Observatorio del IIEP detalla que los aumentos fueron dispares según el tipo de servicio:

Agua: 376% entre diciembre de 2023 y octubre de 2025.

Energía eléctrica: 228% en el mismo período.

Gas natural: 913%, el incremento más alto de todos.

Transporte: 852% en 22 meses.

En conjunto, las tarifas crecieron más del 500%, frente a una inflación acumulada del 171%, lo que demuestra que los aumentos tarifarios superaron ampliamente al índice general de precios.

Desaceleración en 2025

A pesar del fuerte incremento acumulado, el ritmo de subas se desaceleró durante 2025. En lo que va del año, la canasta de servicios públicos registra una suba de 21%, mientras que la inflación acumulada hasta octubre ronda el 24%.

En la comparación interanual —de octubre de 2024 a octubre de 2025—, el costo total de los servicios públicos aumentó 26%, frente a una inflación estimada del 31%.

Los rubros con mayores incrementos interanuales fueron transporte (36%) y gas natural (24%), mientras que agua y energía eléctrica subieron 18% y 16%, respectivamente.

Diferencias por nivel de ingreso

El informe también destaca que, en promedio, los hogares del AMBA pagan tarifas que cubren el 50% del costo real de los servicios, mientras que el otro 50% continúa siendo financiado por el Estado.
Sin embargo, esa proporción varía según el nivel de ingreso. Los sectores medios afrontan prácticamente la totalidad de los aumentos, mientras que los sectores de menores recursos —especialmente aquellos que viven en asentamientos informales— mantienen una alta proporción de subsidios en electricidad y gas.

Contexto y perspectivas

El proceso de actualización tarifaria iniciado a fines de 2023 significó una reducción gradual de los subsidios que, durante años, habían mantenido las tarifas por debajo de los costos reales de producción y distribución.
La medida se aplicó con fuerza durante los primeros meses de 2024 y se moderó a lo largo de 2025, en un contexto de menor inflación y cierta estabilidad cambiaria.

De acuerdo con el Observatorio del IIEP, los aumentos más pronunciados ya se registraron, y el comportamiento futuro de las tarifas dependerá de las decisiones de política energética y de la evolución de los ingresos familiares.

Fuente: GLP

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