Diego Santilli es el nuevo ministro del Interior, en una decisión que consolida el poder de Karina Milei y los Menem. El exitoso candidato en la provincia de Buenos Aires tiene un vínculo muy aceitado con Lule Menem y hace rato que partió de la conducción de Mauricio Macri, que durante toda su carrera hizo lo posible por perjudicarlo.
Al anunciar en X su designación, Milei dijo que «Diego será quien llevará adelante las conversaciones con gobernadores y legisladores para poder articular con el Congreso de la Nación cada uno de los consensos necesarios para las reformas que vienen». Esto es relativo, el nuevo diseño de poder incluye la reelección de Martín Menem en la presidencia de la Cámara de Diputados y junto a su primo Lule, su rol de armadores en el Congreso.
Pero Santilli llega con la autoridad política de haber remontado una elección perdida por 14 puntos en el corazón del peronismo y tiene una excelente relación personal con casi todos los gobernadores. «Que bueno lo del Colo», comentó a LPO uno de los gobernadores de Provincias Unidas, que esta tarde celebraban su designación.
La decisión se tomó luego de un fin de semana de intensas negociaciones con Santiago Caputo, que finalmente declinó asumir la cartera de Interior o una versión ampliada de la misma.
Los Menem resistieron desde el principio esa posibilidad y este domingo lograron convencer a Karina Milei que le impusiera a Caputo una mesa de control político presidida por ella, que además de Caputo integrarían Martín Menem y Patricia Bullrich. «Santiago no aceptó», confirmó a LPO un colaborador de los riojanos, que junto a la hermana presidencial son los grandes ganadores de la interna de palacio.
Pese a esto, el asesor siempre mantuvo una buena relación son Santilli y fue decisivo en la decisión de bajar a Espert y poner al Colorado como primer candidato a diputado en provincia. Por eso, una vez que Milei hizo pública la designación, publicó un tuit felicitándolo.
La designación de Santilli en Interior integraba uno de los diseños de gabinete posible, cuando el gobierno se imaginaba derrotado o empatado en las elecciones, que anticipó LPO, aclarando que faltaba el visto bueno de Karina. El triunfo trastocó ese diseño y la hermana presidencial avanzó con los cambios pero ubicando en los casilleros a incondicionales, como el nuevo jefe de Gabinete, Manuel Adorni, cambio anticipado por este medio.
La pax libertaria que imaginaban los que propusieron la síntesis Adorni jefe de Gabinete- Santiago Caputo ministro del Interior, fue dejada de lado por la supremacía de Karina Milei y los Menem, que decidieron ir por todo.
En principio, Santiago Caputo mantendrá su rol de asesor del Presidente y el control de las áreas claves que maneja, YPF, SIDE, DGI y Aduana, aunque en esta última repartición la semana pasada Toto Caputo nombró a un adjunto.
El poder político que acumuló el ministro de Economía, que se quedó con la Cancillería, es otro signo de este tiempo. Emancipado del tutelaje de su sobrino, el jefe del Palacio de Hacienda sueña con ser uno de los vértices de un nuevo triángulo de hierro, junto a Karina y Milei y alimenta en secreto sus aspiraciones presidenciales.
La designación de Santilli encierra una picardía libertaria: luego del encuentro en Olivos, Macri amenazó con condicionar el apoyo al gobierno de su bloque de veinte diputados. Ese bloque lo lidera Cristian Ritondo histórico amigo y socio político de Santilli. Ahora no le resultará tan fácil tomar distancia de la Rosada.
Pero la designación de Santilli encierra una picardía libertaria: luego del encuentro en Olivos, Macri amenazó con condicionar el apoyo al gobierno de su bloque de veinte diputados. Ese bloque lo lidera Cristian Ritondo histórico amigo y socio político de Santilli. Ahora no le resultará tan fácil tomar distancia de la Rosada.
De lo importante, ahora sólo resta definir el futuro del Ministerio de Justicia, un casillero que adquirió densidad política porque se abre la oportunidad de negociar con el peronismo las dos vacantes en la Corte Suprema, el Procurador de la Nación y casi 300 pliegos de fiscales y jueces federales.
Fuente: LPO



