La multinacional sueca SKF confirmó el cierre definitivo de su fábrica de rodamientos en Tortuguitas, dejando a 145 trabajadores en la calle. La empresa dejará de producir en el país para dedicarse exclusivamente a importar sus productos desde Brasil, en el marco de una reestructuración global que concentra la fabricación en plantas más grandes y avanzadas.
«Tras evaluar cuidadosamente varias propuestas, lamentablemente no hemos encontrado una alternativa sostenible al cierre de nuestra planta en Tortuguitas. Por supuesto, es una decisión difícil, pero necesaria para asegurar nuestra competitividad global a largo plazo», declaró Manish Bhatnagar, presidente de la Región Industrial de las Américas y Australia.
El Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires intervino para garantizar que los cesanteados perciban la indemnización correspondiente y buscar un acuerdo que contemple un pago superior a lo establecido por ley.
El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Abel Furlán, lamentó el cierre de la planta y expresó: «Mientras el mundo cuida su producción, Argentina abre sus puertas a todo lo importado». En el mismo sentido, agregó: «SKF se va a reconvertir en importadora y perdemos puestos de trabajo. Están transformando el modelo productivo de la Argentina. En 90 años habrá vivido momentos difíciles, pero nunca tomó una decisión como esta», en declaraciones a AM 530.
Importaciones y el golpe a la industria nacional
El presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (ADIMRA), Elio Del Re, advirtió en agosto que «la industria local muestra señales de estancamiento y en niveles productivos muy bajos, a lo que se suman las importaciones con porcentajes históricos récord». Según datos de ADIMRA, la producción cayó 5,2% interanual en septiembre y 1,1% respecto de agosto, alcanzando su menor nivel de capacidad instalada desde junio de 2020. Córdoba y Buenos Aires son las provincias más afectadas.
Del Re destacó que “la apertura indiscriminada promete precios bajos a corto plazo, pero sale caro a futuro”. Y alertó: «La industria nacional atraviesa niveles productivos muy bajos, casi idénticos a los de 2024. Es una parálisis preocupante».
SKF Argentina provee a una amplia gama de industrias y sectores, incluyendo la automotriz, aeroespacial, energías renovables, naval y de semiconductores, entre otros.
La dramática carta de un trabajador despedido de SKF
«En los últimos días, los trabajadores de la planta de SKF en Tortuguitas nos enteramos —no por un comunicado oficial ni por una asamblea, sino por un video en YouTube— de que la empresa planea dejar en la calle a más de 150 familias. […] SKF no es una pyme quebrada ni una empresa en crisis», señaló uno de los trabajadores despedidos.
Y explicó: «Es una multinacional sueca con presencia en más de 130 países, que durante 2024 facturó más de 98 mil millones de coronas suecas, equivalentes a unos 9.300 millones de dólares, y que en el primer trimestre de 2025 reportó un margen operativo del 13,5%, incluso en medio de un contexto económico global inestable. […] Hoy más que nunca, los trabajadores de SKF tenemos que organizarnos. […] “No somos un número. Somos trabajadores, somos familias, somos parte de una historia que no se borra con una firma. Y si ellos deciden cerrar la fábrica, que sepan que no la van a cerrar en silencio”.
La decisión empresarial responde a una reestructuración global destinada a concentrar la fabricación en instalaciones más grandes y avanzadas. SKF opera en Argentina desde 1917. Está especializada en la fabricación y comercialización de rodamientos, obturaciones y sistemas de lubricación.
Fuente: Mundo Gremial



