Argentina enfrenta su peor epidemia de dengue con 151,310 casos confirmados. En Tandil ya se ha confirmado un caso autóctono y al parecer los casos en estudio han arrojado datos positivos sobre más personas contagiadas. La inacción municipal es absoluta, sin fumigaciones, sin campañas de prevención, incluso haciendo cortes de pasto en las zonas donde el turismo se moverá durante todo el feriado de Semana Santa y el Día del Veterano y caídos en la guerra de Malvinas. En varios mensajes difundidos por redes sociales, se alerta a la población al uso de repelente y tomar precauciones en los principales paseos.
«Buenas tardes. Avisaron que dio positivo la trampa que pusieron para saber si hay dengue en la zona. Si pueden avisen en los grupos sobre todo los que entrenan al aire libre que se pongan off. Por favor no se olviden de usar repelente antes de ir a entrenar, gracias», es uno de los mensajes que circula por whatsapp en las últimas horas, al parecer de un grupo de entrenamiento.
El dengue, una infección viral transmitida por la picadura de las hembras del mosquito Aedes aegypti, es ahora motivo de preocupación para las autoridades municipales y expertos en ecología de mosquitos ante la posibilidad de qué sucederá en los siguientes meses, dado que las poblaciones de estos mosquitos aún están activas. Además, se considera que el aumento de turismo durante Semana Santa podría incrementar el número de casos.
Hace poco menos de un mes, en conferencia de prensa, las autoridades del Sistema Integrado de Salud Pública de Tandil, manifestaron luego de la confirmación del primer caso autóctono en el Barrio General Belgrano que, «podemos estar cursando una manifestación débil». Sin embargo, de las 50 ovitrampas con las cuales se hace un seguimiento de la evolución del mosquito en diferentes zonas de la ciudad, muchas de ellas ya es vox populi que resultaron muchas de ellas positivas. Desde el ejecutivo, al cual muchos tandilenses le pidieron que fumigue hace apenas dos meses, solo pidieron reforzar las medidas de cuidado y mantener los patios de las viviendas libres de objetos que puedan acumular agua.
“Las temperaturas invernales están siendo tan elevadas y el promedio de la temperatura invernal está siendo tan elevado, que permite el desarrollo del vector durante todo el año. Entonces, no hay un corte de las poblaciones del mosquito y por lo tanto tampoco hay un corte de la transmisión viral durante todo el año. Y eso es lo que se vio el año pasado en la región del noreste argentino, que nunca se cortó la transmisión viral y siempre se estuvieron detectando casos de dengue en esa región de del país”, explicaron desde varias Universidades Nacionales.
El calentamiento global llegó para quedarse. Cuando se tenían que tomar las acciones de mitigación, no se hicieron. Parece que vamos a tener que acostumbrarnos a una mayor frecuencia de eventos climáticos extremos, y eso va a poner en riesgo nuestra salud. Por el calentamiento global también vemos una proliferación y un avance de la distribución geográfica del mosquito vector. Antes, la distribución histórica del límite sur eran las provincias de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires. Y en la actualidad, se ha avanzado hacia la Patagonia. En Tandil el dengue avanza ante la inacción municipal.
