El Municipio de Tandil informó que durante cuatro días (del jueves 18 a domingo 21) el acceso a la cima del Parque Independencia se encontrará cerrado, ya que se estarán haciendo trabajos relacionados al polémico mástil, de más de 40 metros, que romperá la mejor panorámica que tiene la ciudad y generó controversia entre los ciudadanos. La obra se pretende inaugurar el 20 de junio y tiene un costo cercano a los seis millones de pesos, de acuerdo a la partida aprobada por el ejecutivo local.
Como ya lo hemos explicado anteriormente, las críticas por parte de la ciudadanía, tienen fundamentos en el olvidado Plan de Desarrollo Territorial y en el impacto visual que generará la nueva obra. Además de bloquear visualmente uno de los mejores postales que tiene Tandil, todo el Parque Independencia pertenece a los Bienes Patrimoniales catalogados en el Plan de Desarrollo Territorial, vulnerado durante los últimos años, donde no se puede intervenir de la manera que se pretende.
De acuerdo a los datos arrojados por el área de Servicios del Municipio, durante estos cuatro días que el espacio estará cerrado al publico, intentarán dejar colocado el mástil, que tendrá en su parte inferior un trabajo en piedra, donde se distinguirá el número 200, haciendo alusión al Bicentenario de Tandil. La idea que tiene el Intendente es que el Día de la Bandera, el 20 de junio, se lleve a cabo el acto de inauguración de una de las obras más polémicas que se iniciaron para el festejo de los 200 años de la ciudad.
El dato más curioso y llamativo de esta decisión, es que a 100 metros de donde se emplazará el mástil en cuestión, ya hay una bandera Argentina flameando con su respectivo soporte, que es custodiada por el mismísimo fundador de la ciudad, Martín Rodríguez. Sumando también la cantidad de mástiles con banderas, cerro abajo, en el llamado socialmente, «Parque de las Banderas».
El Parque Independencia, con su Castillo Morisco, su portada, el Anfiteatro y su entorno están dentro de los Bienes Patrimoniales, donde en el Plan de Desarrollo Territorial, en su capítulo 10 expresa lo siguiente: «En los lugares de paisaje abierto y natural no se permitirá que la ubicación, volumen, altura, muros, cierres o la instalación de otros elementos, que limite el campo visual y altere los rasgos de la morfología y la topografía del paisaje, o desfigure la perspectiva del mismo».
En cuanto a la preservación del Patrimonio Construido, toda intervención sobre un bien protegido, aun las que se realicen argumentando fines de recuperación, restauración, restitución o puesta en valor del mismo, sin tramitar previamente la conformidad expresa de la Autoridad de Aplicación, dará lugar a la inmediata paralización de los trabajos y a la automática aplicación por la Justicia de Faltas Municipal de las penalidades correspondientes a todas las personas que resulten responsables.
Foto: El diario de Tandil
