Federal A: Santamarina lo ganaba, pero en una ráfaga Liniers se lo dio vuelta y lo venció en Bahía Blanca

Liniers le dio vuelta el resultado al aurinegro en la noche del sábado y ganó 2 a 1 en su casa por la segunda fecha del Federal A. Michel había puesto en ventaja a Santamarina cuando se terminaba el primer tiempo, pero el equipo de Claudio Graff, en una ráfaga de 5 minutos, dio vuelta el marcador y se quedó con los tres puntos. Santamarina el próximo fin de semana recibe a Villa Mitre en Tandil.

El Chivo venció por 2 a 1 al Aurinegro, pero perdía por la mínima y mucho tuvo que trabajar el equipo con carácter, rebeldía y algo de astucia para terminar con una alegría. Y vaya si es elocuente la mejoría. Se notó en el debut ante Villa Mitre y lo ratificó en este segundo partido, donde tuvo que remontar un 0-1 que en el primer tiempo le significaba todo un desafío.

Santamarina dependió mucho de la creatividad del interminable Michel y de la habilidad de Quimey Marín, quien con la «10′» se ubicó por derecha y siempre enganchó para encarar su zurda endiablada. Liniers hizo el gasto y su rival aguardó agazapado para atacar rápido los espacios.

Así llegó a lastimar tres veces. Primero con un cabezazo de Galabert que calentó el horizontal ante un centro de Michel y luego en el gol de la apertura que llegó por un desborde de Marín -a la salida de un lateral- por la derecha y un centro al segundo palo que Michel conectó para anotar abajo, en el primer palo.

Liniers reaccionó buscando la igualdad, pero se expuso atrás y casi lo paga caro, porque otra combinación entre Michel y Quimey -esta vez se invirtieron los actores- no fue gol porque el cabezazo del «10» encontró a Partal bien parado.

El ingreso de Sarrautte por Roa al técnico le salió de maravillas, aunque también es cierto que Carlos Mayor contribuyó reemplazando al lateral izquierdo (Juan Cruz Ridao), quien venía realizando un buen trabajo.

Por ese sector, el derecho del ataque de Liniers, llegó el desequilibrio en apenas 6 minutos. Primero con un desborde de Sarrautte y centro a la cabeza de Cerato que fue letal (habían transcurrido 60 segundos) y luego con otra acción calcada, donde participó Lefiñir para mandar un centro cruzado rasante que el propio Sarrautte, con poco ángulo, terminó por decorar con un tiro alto que infló la red ante la impotencia del arquero Mazza.

El volante, que pintaba para ser figura, no pudo terminar con una sonrisa por un tirón en el isquiotibial izquierdo que lo obligó a abandonar la cancha. Igual, el gesto de deber cumplido, no se lo quita nadie.

Liniers ganó de local y en un torneo tan reñido adquiere un gran valor, especialmente porque había sumado de visitante en el debut.

FUENTE: LA NUEVA PROVINCIA

Redaccion

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver arriba