La propuesta nacional que promueve incrementar la carga horaria en las escuelas del nivel primario de todo el país fue tomada con cautela por funcionarios de la Provincia de Buenos Aires a la hora de avanzar con esa implementación. La posibilidad generó una amplia resistencia de los gremios docentes, quienes advirtieron sobre la potencial pérdida de derechos laborales adquiridos (en especial para trabajadores que trabajan a doble turno). Es que una quinta hora, ocasionaría trastornos a los maestros quienes deberían escoger entre dos empleos (verían con mayor visto bueno avanzar en esquemas de jornada completa de ocho horas).
En medio de esos conflictos, la Provincia busca avanzar en aquellos colegios en los que se puedan arribar a consensos entre docentes, auxiliares y padres. En el primer semestre ya hubo establecimientos de diferentes localidades que sumaron a la iniciativa y para la segunda mitad del año se prevé que más instituciones tengan ocho horas de clases. A nivel local, las escuelas que estarían en condiciones de adaptarse a esta modalidad son las Primarias (EP) 10; 4; 47; 33; 6 y 15.
La subsecretaria de Educación de Provincia, Claudia Bracchi, ratificó que, “estamos trabajando fuertemente con el ministerio de Educación de Nación en la incorporación de la quinta hora en las escuelas primarias. Pero también sumamos el trabajo en las escuelas primarias de jornada completa. Es una línea de trabajo que planteó Axel Kicillof para ver cómo vamos ampliando el horario escolar” a propósito de la incorporación de una veintena de escuelas al esquema de jornada completa durante el reinicio del ciclo lectivo.
Sobre la incorporación de la hora extra explicó: “En la provincia lo estamos llevando a cabo con los cuidados pertinentes de un cambio institucional y también comunitario. Es más tiempo y hay que organizar esa quinta hora. Es un trabajo en la escuela, con los docentes y las familias” dijo.
“Todo se va ser por etapas, de manera que el diálogo y el acuerdo sea lo que prevalezca a un horizonte de sentido que es más tiempo escolar para más enseñanza y por lo tanto más aprendizaje” remarcó Claudia Bracchi.
Fuentes de la Dirección General de Cultura y Educación explicaron que la medida implica un cambio organizacional en las escuelas, que pasan a tener una jornada escolar de 8 horas diarias, y se enmarca en la propuesta del Gobierno nacional de ampliar el período de escolaridad. En el territorio bonarense existen diferentes opciones para concretar la propuesta de lograr más tiempo de escuela: la jornada completa de 8 horas, la jornada extendida de 6 horas y una hora adicional en escuelas de jornada simple.