Rogelio Iparraguirre: «Estamos en una ciudad maravillosa, una tierra de oportunidades que acumula con los años un montón de potencialidades dormidas»

Con el aniversario 199° de Tandil como disparador original y tomando los caminos del presente y de la ciudad que debemos pensar para el futuro, en LOT conversamos con el Diputado Nacional Rogelio Iparraguirre sobre los desafíos que se vienen como sociedad sin esquivar los temas coyunturales de la Argentina. Aprovechamos para que nos exprese sus tres deseos para la ciudad: “tres cosas que van al mismo lugar y es que tengamos de una vez los tandilenses la inteligencia, la capacidad y la generosidad para explotar en su máxima expresión las potencialidades que esta comunidad ha sabido engendrar y que no le debe nada a nadie. Debemos encontrarnos en un futuro, lo más cercano posible, con una ciudad más justa, igualitaria y equitativa.”

En varias oportunidades te he escuchado decir que “siempre hay que hacer lo posible para estar a la altura de las circunstancias”. Hoy desde tu lugar como Diputado Nacional estás trabajando día a día para que Tandil sea un lugar en donde los vecinos y vecinas tengan una mejor calidad de vida, no se sientan abandonados por la gestión local, y en buscar un desarrollo integral para que todos tengan las mismas oportunidades desde el día uno de sus vidas. ¿Cuál es tu motor fundamental para estar a la altura de semejante desafío personal y ciudadano en este Tandil que en muchos casos se manifiesta tan desigual? 

Mi fuerza y motor está en el mismo lugar en el que se encendió por primera vez, cursando la adolescencia, que es donde se enciende la llama interna y en algún momento de la vida de un militante ocurre como un quiebre. Donde uno decide trascenderse a sí mismo y volcarse vocacionalmente al laburo por los demás. Por formación, por experiencias vividas, a uno la injusticia lo atraviesa de una manera tal que se vuelve intolerable. Creo profundamente en la militancia política con una enorme vocación en lo público, entendido como el ámbito donde se desarrollan la fuerza, las capacidades y la potencialidad de accionar positivamente para transformar las injusticias existentes. Ese motor que a los 15 años empecé a sentir que se encendía, hago personalmente un ejercicio de auto vigilancia permanente para ver que siga siendo el mismo. Mi viejo en un momento de mi vida en donde él vio que mi militancia política iba en serio, que era mi vocación, me dijo: “no te olvides nunca de hacer el ejercicio de cada tanto parar la pelota y buscate dentro de vos mismo, a ver si te encontrás”. Cuando digo lo de estar a la altura de las circunstancias me lo digo a mi mismo, porque hay que tener la vara muy alta, cometiendo errores por supuesto porque somos seres humanos. En este nuevo rol como Diputado lo que asumí es que es una posibilidad muy grande para mi comunidad, para Tandil. Lo que hago es intentar demostrarmelo y demostrarselo a la gente, no en el ejercicio de decir tengo razón, sino con hechos. Con acciones y gestiones que transformen positivamente la calidad de vida de nuestros vecinos, empezando por los más postergados. 

Estamos en una ciudad maravillosa que sin lugar a dudas es una tierra de oportunidades que con el tiempo veo que acumula un montón de potencialidades dormidas, que no terminan de ser incentivadas, conducidas y motivadas por el Municipio para desarrollar todo ese potencial que empiece por generar igualdad de condiciones de vida, en infraestructura, la capacidad de mejorar las condiciones de empleo y aumentarlo en Tandil. Existe en la matriz social, económica, productiva de Tandil, esa potencia que falta ser aprovechada en toda su dimensión.Todas las aristas que en la esfera pública se desarrollan para en términos integrales mejorar la comunidad, que además es la que me dio todo. Yo no soy yo sin Tandil. 

Asiduamente uso una metáfora para describir el Tandil del presente y cierta comparación con el pasado y es que hoy la ciudad es un cristal roto, donde hay que unir las piezas para que conformen un crisol pero integrado. Tiene que ver con un proceso que vivió Tandil al calor del desarrollo y el crecimiento que ha vivido la ciudad particularmente en la década del 2003/2013 donde el crecimiento no fue parejo. Hay sectores de la ciudad que tienen sus circuitos sociales, familiares, educativos, deportivos, de ocio y entretenimiento, y de consumo en un radio determinado. En algunos está la vida materialmente resuelta (empleo, vivienda, salud, educación, infraestructura) y en otras tenemos todo pendiente. No podemos ser buenos tandilenses si uno no se conmueve ante esta desigualdad reinante.

En las últimas semanas te reuniste con el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en donde además de evaluar las políticas públicas y las obras que se llevan a cabo en nuestra ciudad, está la intención clara de seguir mejorando la vida de los tandilenses y potenciar el desarrollo productivo de nuestra ciudad. Sin menospreciar el motor que es el turismo, en una temporada récord para la ciudad que le da trabajo a mucha gente. ¿Dónde vamos a encontrar ese desarrollo en el corto y mediano plazo a nivel productivo? ¿Cuáles son los elementos que tenemos para potenciar a la ciudad y no ser únicamente un lugar en donde se apuesta al turismo?

La prioridad número uno del Tandil de hoy es activar de manera consensuada, uniendo todas las fuerzas, sin distingo de banderías políticas, el sector público y privado, las entidades educativas, culturales y deportivas, reconstruir todo el tejido social de ese Tandil integrado que fue quedando como un recuerdo del pasado para, a partir de ahí, volver a hacer causa común y construir ese Tandil con potencia. Hay una muy grande generación de jóvenes emprendedores con una cabeza y mentalidad de avanzada dispuestos a ir hacia adelante, que encuentran en el Estado Municipal, cuando menos el ninguneo y cuando más directamente trabas a su desarrollo. 

Tandil tiene efectivamente una enorme ventaja comparativa con las ciudades intermedias de Argentina y es que tiene una matriz enormemente diferenciada. Esto tiene que entrañar una acción pública que sea la de sostener cada una de las patas de ese andamiaje productivo, no cambiar de novia cada tanto. He escuchado decir con muchísima pena, en ocasión de tal vez el hecho más triste de la historia productiva de Tandil que fue el cierre de Metalúrgica, a las máximas autoridades que ostentan la mayor responsabilidad pública que tiene una ciudad, decir que “era la crónica de una muerte anunciada” y “la industria metalmecánica de Tandil tenía carnet de defunción” muy tristes los dos ejemplos elegidos porque hablan de la muerte de parte del ADN de la identidad tandilense como es la industria metalmecánica. En segundo lugar porque quien ostenta responsabilidades públicas no puede alegar sus propias torpezas, si decis eso es porque lo venias viendo, lo que no vimos el resto de los vecinos y vecinas es que hayas hecho lo imposible para evitar algo que evidentemente venias viendo. Y en tercer lugar porque se hizo un diagnóstico errado porque apenas cuatro años después de ese hecho trágico, cuando cambia el proyecto nacional, el crecimiento de la industria metalmecánica, pandemia mediante, tiene 120 altas por convenio con lo cual me puedo aventurar a decir que es el sector que más empleo generó en Tandil siguiendo al software, un sector con un dinamismo que la economía contemporánea no conocía  y el turismo que tiene que tener un salto en la calidad de servicios que prestamos y la calidad del empleo. 

El sector del software es un gran consumidor con fuerte demanda en materia gris que fue posible porque tenemos en Tandil la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. Es un sector intensivista en su uso de mano de obra al estar vinculado a la prestación de servicios al mercado externo donde la materia gris es casi una commodity que genera divisas, riqueza, pero también necesita acompañamiento e instancias donde puedan ser articuladas entre lo público y lo privado. 

Además por supuesto que no hay proyecto de Tandil sin el agro, sería un dislate absoluto. Esto lo dice alguien que ha madurado en los últimos 15 años en relación a la mirada que uno pudo ir construyendo para el sector. El campo produce cerca del 40% del Producto Bruto Geográfico de Tandil y está dominado por generaciones de avanzada en relación a la tecnología aplicada, los métodos productivos, la agregación de valor. Estamos viendo la punta del iceberg, tenemos que trabajar todos juntos para que el agro, el sector más dinámico de la economía local, multiplique sus esfuerzos y sus posibilidades para agregar valor en Tandil. Por ejemplo, tenemos en la industria porcina un sector que tiene un desarrollo incipiente pero que puede hacer mucho más. En cuatro años si articulamos políticas públicas en conjunto con la inversión y el riesgo que asume el sector privado podemos duplicar con modelos sustentables en términos animales la producción porcina y los subproductos en territorio. Tandil entre la Universidad, un sector público fuerte, la metalmecánica, el software, el agro, el turismo, los servicios, tenemos para mucho más. Necesitamos una visión más integral y no andar cambiando de novia todo el tiempo.

Pudiste en primera persona gestionar para la ciudad obras públicas que durante mucho tiempo durmieron en las diferentes promesas que la sociedad de Tandil tuvo que escuchar. El caso más significativo es la obra de iluminación de la Rotonda de las Rutas 226 y 30, que llevó más de 20 años de palabrerios y nunca nadie ponía una columna de luz, además de asfalto para sectores postergados para el ejecutivo local ¿Cuáles son las sensaciones de ver que esa obra es una realidad para los tandilenses y los miles de turistas que nos visitan semana a semana? 

Es el orgullo de poder experimentar todos los días algo que también me marcaron mis viejos y fue “nunca hagas algo que te haga tener que bajar la mirada en la calle o cruzar de vereda”. Cuando me comprometo con algo voy a fondo. Entiendo que parte de la vocación por la gestión de lo público tiene que ver con que las excusas nunca deben ser suficientes como para no hacer lo que de verdad hay que hacer, así encaro las gestiones. La sensación es caminar tu ciudad donde constantemente te cruzas con vecinas y vecinos y no tengo que bajar la mirada ante nadie. Sé que empujando en serio el carro se puede resolver hasta aquello que parecía imposible, lo hago de la mano del intendente, guste o no guste a propios y extraños porque Miguel Lunghi es la persona que por quinta vez consecutiva votaron mis vecinos y para mi eso es palabra santa y como la institucionalidad tiene que ser la impronta de la gestión de lo público tengo que trabajar con él. Todas estas gestiones no son para Lunghi, no son para Iparraguirre, es para mejorar la calidad de vida de los vecinos de la comunidad de la cual soy parte y la que quiero seguir yendo al jardín a llevar a Malvina, al supermercado, al club, a la plaza como lo hago felizmente y sentirme a gusto con mi comunidad.

El tema central de la semana en cuanto a la economía de nuestro país es el proyecto de ley que se presentó que busca crear el Fondo Nacional para la Cancelación de Deuda con el FMI. El mismo busca que quienes tengan bienes en otros países y no estén declarados hagan un aporte extraordinario (20% de lo no declarado, en dólares), Para los no que paguen pena en prisión. Hay 471.507 millones de dólares en el exterior, solo están declarados 69.000 millones. Cristina Kirchner lo adelantó el 10 de diciembre de 2021 frente a una plaza repleta. ¿Qué postura y qué visión tenés de lo anunciado? 

Es la pata que faltaba, es la historia del peronismo, honrar nuestras deudas. Nadie dijo que no había que pagarle al FMI o que no había que arribar un acuerdo, el tema es ¿cómo? y ¿Quién paga?. En función de esa historia del peronismo, que es el gobierno que termina siempre honrando las deudas que contrajeron otros, la vuelta de rosca que nos estaba faltando era ¿Por dónde?. Me parece un acto de justicia elemental empezar buscando los recursos de aquellos que en función del mismo endeudamiento que hoy estamos asumiendo pagar, fugaron de Argentina. 8 de cada 10 dólares que entraron de esos 44.500 millones de dólares, el préstamo más grande de la historia que otorgó a otro país el FMI es este que le otorgó a Mauricio Macri. no están en Argentina, ni en escuelas, ni en rutas, ni en salud, ni en educación, ni en infraestructura, no están. Espero que se desenvuelva de la mejor manera posible y que haya una comprensión cabal del pueblo argentino en torno a esto y que no caigamos en la trampa de los mismos poderosos que fugaron esos 8 de cada 10 dólares que siempre buscan confundir. Tenemos que honrar el contrato electoral que firmamos en 2019 con el pueblo argentino.

Hoy es el cumpleaños de nuestra ciudad y haciendo el ejercicio de pedir los tres deseos tradicionales en el camino a nuestro bicentenario ¿Qué pedirías para Tandil en este 199° aniversario de su fundación?

Tres cosas que van al mismo lugar y es que tengamos de una vez los tandilenses la inteligencia, la capacidad y la generosidad para explotar en su máxima expresión las potencialidades que esta comunidad ha sabido engendrar y que no le debe nada a nadie, para que podamos encontrarnos en un futuro lo más cercano posible con una ciudad más justa, más igualitaria y más equitativa.

Horacio Sobol

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