¿Alcanza con fotomultas para evitar tragedias viales?

Desde hace algunos años las tragedias viales son moneda corriente en Tandil y recién ahora se conoció una reacción del Municipio: medios locales anunciaron la implementación de fotomultas. Sin datos oficiales y evitando el diálogo con cualquier persona o institución que acerque una propuesta para abordar la problemática, las políticas públicas para ordenar el tránsito vial en la ciudad no existen.

¿Fotomultas para las tragedias viales?

El Municipio de Tandil planea instalar cámaras fotográficas en diferentes puntos de la ciudad y avanzar con la implementación de fotomultas. La primicia que se anunció en la primera mañana de Radio Voz tendría el objetivo de prevenir accidentes de tránsito.

No es la primera vez que el Municipio avanza con un proyecto de estas características: en julio del 2014 anunció la implementación de cámaras en diferentes avenidas de la ciudad y aunque una empresa ganó la licitación, el proyecto parece que nunca avanzó (¿alguien conoce un tandilense que haya recibido una multa fotográfica por malas maniobras en alguna calle local?). “Se busca seguir avanzado en un programa de incorporación de nuevas tecnologías para brindar mejores servicios y para la prevención, en este caso apuntando a garantizar la seguridad vial”, es posible leer en la gacetilla que anunció la novedad.

Lo cierto es que sin poder confirmar la información por vacaciones de funcionarios (merecidas gente, descansen que vaya a saber qué nos espera en el 2022) y el desconocimiento de la Dirección de Tránsito y Vialidad (“No tenemos idea del proyecto”, aseguró un alto rango de la oficina municipal), los accidentes de tránsito son moneda corriente en la ciudad.

Datos oficiales no, búsqueda en google sí

No existen estadísticas oficiales sobre la cantidad de accidentes viales en Tandil. Una rápida búsqueda en cualquier portal de la ciudad acusa más de diez siniestros durante enero. Los últimos dos involucraron a menores de edad que están en estado grave: ambos tienen 17 años y circulaban en moto en plena zona urbana. 

Para expandir la búsqueda que no tiene datos oficiales, se puede googlear «accidentes fatales en Tandil» y encontrar de todo tipo: dos muertos el mismo día en diferentes choques; una familia destruida luego de un impacto a la salida de una fiesta; un funcionario municipal que atropella a un joven y se va; y siniestros fatales en pleno centro.

No hay estadísticas oficiales, ni un relato sostenido que grafique lo complicado de la situación, aunque una simple googleada permite tener un pantallazo de la necesidad de una política pública para dejar de enterrar personas por un choque.

Las políticas públicas que nos faltan para salvar vidas

En materia de tránsito y educación vial, el Frente de Todos también tiene su propuesta y también fue desechada por el Gobierno Municipal (al decir desechada, hay que entender que ni siquiera fue discutida; propuesta negada parece más certera). Antes de comenzar con su campaña electoral en 2019, el hoy Diputado Nacional Rogelio Iparraguirre, presentó el proyecto para la creación de la Escuela Municipal de Manejo. “Son muchos los accidentes y las fatalidades que suceden todos los días en Tandil por las faltas de tránsito que cometemos. Este es un proyecto que apunta a cambiar conductas de raíz y formar mejores conductores de autos, motos, camiones y demás”, explica el video que publicó Iparraguirre hace más de dos años atrás. 

A la gestión lunghista solo se le conocen algunas pequeñas muestras de políticas públicas para ordenar el tránsito y prevenir accidentes viales: los operativos de la Dirección de Vialidad (para algunos una simple maniobra de recaudación; mis respetos para los trabajadores de la oficina municipal que también sufren las consecuencias de la falta de un plan); alguna que otra campaña de concientización (un cartel con un tomate estrellado contra el piso) y ahora las fotomultas. “El Municipio tiene todas las herramientas para poder actuar y, como dicen ellos, cambiar la mentalidad de la gente”, aseguró Juan Pedro Larraburu, titular de la ONG Tránsito entre Todos. 
Para Larraburu, la ciudad cuenta con todos los recursos necesarios para llevar adelante “una campaña vial organizada y prolongada en el tiempo”, que apunte a prevenir accidentes de tránsito, mejorar la educación vial y realizar campañas de concientización. Para comenzar con esta acción puntual, desde Tránsito entre Todos se le propusieron diferentes líneas de trabajo al Municipio de Tandil.

El Consejo Consultivo Vial fue tal vez la propuesta más concreta que le acercaron diferentes ONG (entre ellas Tránsito entre Todos) e instituciones locales para abordar la problemática. “La idea era empezar a trabajar para tener datos que nos permitan saber en dónde estamos parados: cuáles son las esquinas con más accidentes o analizar las modalidades de manejo pero nunca se concretó”, finalizó Larraburu.

Simón Ventos

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