Marcha de gastronómicos: el pedido de un trabajador para el Municipio y los empresarios

«Sobre el reclamo de gastronómicos, hablemos de gastronomía», es el título del texto en el que Agustín Galassi, trabajador de un restaurante tandilense, reivindica el reclamo de los empresarios y también les pide que dejen de precarizar a sus empleados.

En la publicación en redes sociales, Galassi explica que el reclamo de los dueños de restaurantes y bares es justo. Además le pide al Intendente Lunghi que les permitan trabajar. En el texto también pide a los empresarios gastronómicos que terminen con la precarización y los «salarios por debajo del mínimo, la falta de pago de aguinaldo y vacaciones, sumado a condiciones de trabajo poco dignas, que hacen de un rubro hermoso el infierno de muchos».

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SOBRE EL RECLAMO DE GASTRONOMICOS, HABLEMOS DE GASTRONOMÍA.

Hace algunos años tengo la suerte de trabajar en @tierradeazafranes, primer local gastronómico dónde percibí vacaciones y aguinaldo. Menciono esto, ya que en el siglo XXI es terrible tener que marcarlo como una novedad. En ese sentido, marco también la suerte de trabajar en un lugar serio. Suerte que no todos tienen en el Tandil de los servicios y el turismo.

El reclamo gastronómico es justo. Necesitamos trabajar. Por el tipo de industria, atada al consumo y la liquidez, la situación es realmente crítica. PERO DEBEMOS RECONOCER QUE PARA MUCHOS LA SITUACION ERA CRITICA PREVIO AL COVID.

Entonces hablemos de gastronomía, pero hablemos integralmente.

Al señor intendente: necesitamos trabajar, con los protocolos necesarios, como desde el momento cero. Usted es responsable y debe hacerse cargo, un arte que le es esquivó. Su rebeldía boba, que no reporto ningún beneficio a la ciudad, es origen de una sociedad sin conducta. No es la gastronomía el foco de contagio, no seamos obtusos.

A los propietarios gastronómicos: ustedes encabezaron el reclamo, nosotros los trabajadores los bancamos. Pero a cambio exigimos dejar de hacer de la precarización una práctica del rubro. Salarios por debajo del mínimo, la falta de pago de aguinaldo y vacaciones, sumado a condiciones de trabajo poco dignas, hacen de un rubro hermoso el infierno de muchos. Que esto les sirva para darse cuenta que nadie está salvado y que todos nos necesitamos.

Atentamente, un cocinero 4 de copas.

Redaccion

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