Por Juliana Cuin
La semana pasada hubo un salseo importante entre flacas y gordas. Flacas imponiendo que nos amemos tal cual somos y gordas pidiendo qué no se apropien de nuestras problemáticas invisibilizadas.
Activistas gordxs salieron al cruce puesto que, Influencers hegemonicxs sistemáticamente nos proponen contenido para amarnos ta cual somos, mezclado con máquinas provenientes de estafas piramidales que nos dejarán la cara de una niña de 5 años, batidos milagrosos qué nos dejarán flacas y makeup para ser diosas.
¿Quienes pueden hablar de «amor propio»?
Todes podemos hablar de ello, también podemos y debemos hablar de empoderamiento, feminismo, identidades sexuales, disidencias, etc.
Los medios nos meten en agenda estas temáticas porque facticamente, de un tiempo a esta parte nos empezamos a hacer estos interrogantes; por supuesto que el neoliberalismo va a armarnos un discurso al respecto y vendernoslo maquillado y listo para consumir.
Hay trampas dentro del discurso del amor propio; proponer amarte con tus defectos es pensar que hay cuerpos perfectos y cuerpos defectuosos. Pero entonces, si nos ofrecen un cuerpo sin marcas, ni poros, ni grasa corporal..Qué es lo real? Qué es lo perfecto?
Consideró que es erróneo polarizar entre flacxs y gordxs, quién tiene razón y quién no, quién puede hablar de una cosa o de otra. Lo importante es respetar los reclamos del otrx, ser genuino y responsable en el contenido que cada unx produce y comparte.
Por sobre todo hay que ser consciente de los privilegios que cada unx tiene.
Cómo se qué soy privilegiada con respecto a otra persona? Preguntándome n qué le tengo miedo; sin mi mayor miedo es que no me gusta la imagen que me devuelve el espejo y otra persona tiene miedo a no poder darle de comer a sus hijos por ejemplo, ahí tengo un privilegio y como tal, debo ejercitar la empatía y el respeto.
Por último, un ejercicio para nuestro consumo. Si estamos cansados de ver contenido hegemónico, heteropatriarcal, del que estamos hartos, empecemos a seguir a personas disidentes, activistas de problemáticas reales, medios autogestivos (como LOT) apoyando y compartiendo ese contenido que nos resulta interesante.
