José Delgado y Martín Canales junto a todos los músicos de Abrazo de guitarra continúan trabajando en el cuarto capítulo de este documental, que “intentará agradecer al lugar donde vivimos”, según expresan los artistas.
“En esta ocasión participaron unos treinta guitarristas, un poeta, un realizador audiovisual y nuestras familias que nos acompañaron con mucho cariño”, señala Canales, sentado delante de una computadora que contiene más de 11 horas de grabación.
A su lado, Delgado explica que “el desafío es intervenir lo menos posible para que cada película muestre lo que se generó espontáneamente en el lugar donde hicimos las tomas. Creemos en la belleza de lo simple”.
Así es que el valor de cada trabajo está en lo que los oídos del productor musical y los ojos del director de cámaras pueden captar. Por lo que pudieron adelantar ambos, en esta oportunidad, los espectadores disfrutarán de un homenaje a los compositores tandilenses que marcaron un camino diferente desde la década del 90 en el folklore y de un par de personajes entrañables de las calles de esta ciudad. Sin embargo, aunque aparezca el color local, Abrazo de guitarra sigue siendo universal. “Hay valores y sentimientos que son compartidos por todos, en cualquier parte del planeta, pero se presentan en este escenario entre sierras. Nuestra propuesta es tan universal y local como Bepo Ghezzi”, cuentan.