Armando March, fundador y dueño de Quarryman, brindó una entrevista al diario El Eco de Tandil. El empresario mostró su preocupación por la situación que atraviesa también al sector productivo en Argentina.
“A nosotros nos vienen tarifas eléctricas con valores exorbitantes, reconozco que pagábamos barato al final del otro gobierno pero esto se fue de toda lógica”, señaló el creador de una de las cervezas artesanales locales.
La situación de las familias argentinas y la baja sostenida del poder adquisitivo deprime el consumo interno. “Evidentemente la repercusión es inmediata, la facturación no para de caer y estamos en niveles que nos asustan. Tengo contacto con colegas de todo el país y la situación es la misma, están todos perdiendo rentabilidad, bajando precios, despidiendo gente porque la facturación se desploma sin parar”, expresó March.
Además, a la cuestión tarifaria hay que agregarle que las materias primas se trasladan desde otros sitios hasta Tandil, lo que implica un costo de transporte, y como el combustible está dolarizado es un servicio caro de afrontar para el productor.
Aumento de costos
“Los costos de producción aumentan y no se pueden trasladar a los precios, no hay consumo ni demanda, entonces se traduce en pérdida de rentabilidad. No podemos tocar los precios y si lo hacemos, tocarlos a la baja”, detalló.
Frente a un panorama de incertidumbre y preocupación, el productor cervecero no está ajeno a la coyuntura actual. “Se nos cierra la posibilidad de seguir creciendo, tomar personal, no entiendo cuáles son los beneficios de todo esto. Los que nos dedicamos a la producción empezamos a sentirnos los tontos del barrio, esperamos que los vientos cambien”, concluyó.
Fuente: El Eco de Tandil