En lo que va de 2017 ya ganó cinco torneos y la noticia lo encuentra en Wimbledon, donde esta semana competirá. Nacido en Río Tercero, sufrió un infarto medular cuando tenía un año y medio, lo que lo dejó inmóvil de la cintura para abajo. A los seis años empezó a practicar tenis adaptado y fue superando obstáculos hasta llegar a este momento cumbre. «A lo más alto no se llega solo.» Con esas palabras, el cordobés Gustavo Fernandez resumió sus sensaciones por haber alcanzado la cima: desde este lunes es el número uno del ranking mundial de tenis en silla de ruedas.
Ganador este año del Abierto de Australia y finalista en Roland Garros, Fernández superó en el escalafón al británico Gordon Reid para situarse por primera vez a la cima. Lo celebró con un post en redes sociales, donde destaca una larga lista de personas que lo acompañaron en su camino desde que se volcó a este deporte.
El año pasado fue el abanderado de la delegación argentina en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro. Entre otros logros, el cordobés también cuenta con tres medallas en Juegos Panamericanos y se alzó con el trofeo en Wimbledon 2015 en la categoría de dobles masculino.
