Este sábado el partido de gobierno y líder dentro de la Alianza Cambiemos, el PRO del presidente Mauricio Macri, llamó a su militancia y a sus adherentes a participar de un nuevo «timbreo» supuestamente espontáneo (ya veremos que no), del que se sumó en Tandil el concejal Marcos Nicolini, acompañado de algunos de los ediles que lo siguen en su cruzada contra la hegemonía lunghista.
Resulta que fue Francisco Sola, el exsecretario del bloque PRO en el concejo deliberante y actual empleado de la administración PRO en Capital Federal, quien subió a las redes sociales una foto en la que se lo ve participando del timbreo junto al concejal Nicolini, a los concejales Gabriel Bayerque y Araceli De Vanna y con el coordinador de la oficina de empleo municipal, Juan Manuel Quaranta.
Nicolini el elegido del PRO
Es llamativo que el concejal Marcos Nicolini se haya sumado a la puesta en escena del PRO que eufemísticamente llaman «timbreo», justo después de que se haya distanciado de su histórico jefe político, el Dr. Miguen Ángel Lunghi. La marca registrada del partido del presidente es el supuesto timbreo espontáneo que realizan en el conurbano y en el interior del país, para hablar con la gente y obviamente hacer campaña en un año electoral.
Desde que tomó distancia del padiatra se viene especulando con que Nicolini sea la figurita de recambio elegida por la gobernadora María Eugenia Vidal para disputarle la intendencia a Lunghi. Pero ese apoyo de la gobernadora no es gratuito, y ya se lo puyede ver al concejal «opoficislista» de la política local siguiendo los pasos marketineros y publicitarios que dicta el publicista estreloa Jaime Durán Barba para los de amarillo.
Una puesta en escena
Mucho se ha hablado de la puesta en escena que significan los «timbreos espontáneos», pero también muchos son los testimonios de gente que cuenta cómo se elige a las personas que se van a visitar. El presidente Mauricio Macri no puede caer en una casa habitada por seguidores de la expresidenta, por lo que los laboratorios del PRO estudian al detalle a quién visitarán, siempre con un fotógrafo oficial a mano.
Tanto es así, que la operación de propaganda quedó al descubierto con una foto subida por el mismo equipo amarillo, en la que se ve a una mujer abriendo la puerta a un sonriente Mauricio, solo que el fotógrafo ya estaba adentro de la casa, desde donde capturó la imagen. O el fotógrafo es un adelantado, o la puesta en escena fue muy burda.
