En el 2011 Lorena Martins denunció que su padre, Raúl Martins, operaba una red de trata de mujeres que contaba con la activa protección del gobierno macrista y diversos jueces.
Raúl Martins fue agente de la SIDE durante 13 años y se lo considera uno de los mayores exponentes en la movida de boliches nocturnos en la Ciudad de Buenos Aires y en Cancún, la turística ciudad mexicana.
En su momento, Lorena también denunció que «el partido de Mauricio Macri recibió aportes» para diversas campañas de la organización de su padre. «Es fácil deducir que el aporte de dinero a la campaña era a cambio de cierta protección para estos locales», destacó en su momento la denunciante.
Sin embargo, ayer la propia Lorena publicó en su cuenta de Facebook un mensaje en el que volvía a criticar al Presidente: «La complicidad actual del Estado argentino y en concreto, del presidente Mauricio Macri con respecto al encubrimiento y protección a Raúl Martins es vergonzosa».
«No puede representarlos un señor con tanta bajeza moral que fue financiado por proxenetas y fotografiado en locales de mi padre abrazado a un Gabriel Conde, quien fue condenado por corrupción de menores», afirmó la denunciante quien sostuvo que hace cuatro años se encuentra exiliada.