Cerca de cien empresarios nacionales de diversos sectores, que están siendo duramente golpeados por las recetas económicas del gobierno nacional, lanzaron el Movimiento de Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino. El espacio está conformado por representantes de PyMES, cooperativas y empresas recuperadas. La presentación se realizó en el Instituto PATRIA y fue acompañada por legisladores, economistas y referentes de organizaciones políticas y sociales.
El objetivo es representar políticamente a los empresarios ante el avance de las políticas neoliberales con las que la Alianza Cambiemos está poniendo en jaque al mercado interno, y en consecuencia a comercios, industrias y empresas de servicios. Leo Bilanski, referente del movimiento, manifestó que “mientras los CEO estén al frente de los ministerios, no hay corrección posible de la política nacional” ya que “es muy difícil que alguien que tomó decisiones deliberadas en un sentido al otro año diga que van a optar por el sentido opuesto”, y ponderó la importancia de organizar políticamente al sector ya que “mientras las grandes corporaciones se nuclean políticamente en AEA, en el G6 o en IDEA no hay una organización que cumpla esa función y proteja a las empresas que viven y producen para el mercado interno”.
Por su parte, el dirigente metalúrgico y referente de la Confederación General Económica (CGE), Augusto Santucho, sostuvo “hoy en día hay un montón de medidas que van en detrimento de la industria nacional” y que “esta organización que estamos presentando tiene por objetivo ser una voz calificada y representativa, sabemos que entre los empresarios hay miedo al momento de expresarse y venimos a saldar esa cuestión”.
En el documento fundacional del Movimiento de Empresarios Nacionales se pueden leer algunos de sus puntos más destacados:
1. Que el plan de desarrollo nacional lo administren el Estado democrático y su pueblo, con sentido incluyente, y no el mercado.
2. Debemos abastecer bienes y servicios de calidad internacional y a precios asequibles a todos nuestros compatriotas, en primera instancia, satisfaciendo la demanda interna y desarrollando la producción con el objeto de colocar saldos de producción en el mercado internacional y no al revés.
3. El Estado y los empresarios promoverán el trabajo digno de manera que este sea un medio de progreso y no de subsistencia. El salario debe diseñarse en función del bienestar de nuestro pueblo y como medio fundamental de sustentabilidad del mercado interno.
4. El vínculo económico comercial con el resto de los países debe establecerse de acuerdo a que beneficie y proyecte al exterior a las empresas nacionales como consecuencia del desarrollo interno generando riqueza para la Nación y precios justos para los argentinos.