Bienvenida, te estábamos esperando

Desafiando a las frases hechas de la historia, la quinta fue la vencida, el maleficio ha terminado. Argentina por primera vez en la historia es campeón de la Copa Davis. Con Juan Martín Del Potro como raqueta de oro, sumado al quinto punto ganado por el azuleño Federico Delbonis, el equipo conducido por Daniel Orsanic e integrado por Guido Pella y Leonardo Mayer pudo sacarse de encima las cuatro finales perdidas, y logró en tierras croatas subir sobre los hombros a una señora a la que apodan ensaladera de plata. Salud campeones.

El cuarto punto que Del Potro le dio vuelta a Cilic fue determinante para la entrada triunfante de Delbonis, a quien no le tembló el pulso, ni tampoco se lo comió el miedo escénico en el Arena Zagreb y en tres sets derrotó al gigante Karlovic para que la fiesta, con Maradona incluido, sea para la eternidad. Argentina era, hasta hoy, el único país en la historia del torneo, que comenzó a disputarse en 1900, que había perdido tantas finales sin ganar al menos una. Las rachas están hechas para cortarlas y así lo expresa este grupo de tenistas, que a domicilio, festejan en Croacia.

Federico Delbonis, el pibe de Azul, fue el encargado de darle el quinto punto, el ganador de serie. No fue sencillo para un jugador que está acostumbrado a jugar en el polvo de ladrillo, ni mucho menos aguantar las bombas de saque de Karlovic, sin embargo desnudó el saque del croata, fue muy inteligente para jugar bien abajo y así el gigante de 2.11 metros erró muchas voleas. El resultado ya pasa a ser una dato deportivo, mientras que la epopeya que lograron estos muchachos es bien simple de describir:  Triunfo en Polonia por 3 a 2, victoria en Italia por 3 a 1, la fiesta a domicilio en Glasgow frente a Murray y sus amigos por 3 a 2. El triunfo histórico ante los croatas, quizás siendo locales por la cantidad de argentinos presentes en el Arena de Zagreb quedará en la memoria del deporte argentino.

Definitivamente, más allá del trofeo ganado como equipo, el 2016 para Juan Martín Del Potro, es el año del renacimiento. Minutos después de darle al equipo el cuarto punto, se desnudo en frases para decir, nuevamente, que estuvo muy cerca de dejar el tenis. «Acá estoy» dijo envalentonado, tras ganarle a su amigo Marin Cilic y transformar este año par, en su ingreso definitivo al salón de los mejores deportistas de la historia argentina. Bienvenido te estábamos esperando, es seguramente la frase que Diego Armando Maradona le cante al oído a la Torre de Tandil.

 

Horacio Sobol

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